El dolor y los analgésicos convencionales

El dolor es una experiencia sensorial desagradable, que se traduce en forma de molestia, ardor, pinchazo u hormigueo.

El dolor puede ser sordo o agudo, constante o intermitente y suele venir acompañado de patologías de orígenes y de gravedad muy diversos.

En todo caso, el dolor es una señal de que algo no va bien en cualquier parte de nuestro cuerpo, ya sea en la cabeza, en el abdomen, el pecho, la espalda, la pelvis, los músculos, etc.

Por lo general, ante un malestar, una inflamación o un dolor acudimos a alternativas de acción rápida, como a los analgésicos convencionales. En este sentido, los analgésicos son medicamentos capaces de reducir el dolor y de aliviar nuestros malestares.

Pero está demostrado que, a largo plazo, estos fármacos suelen conllevar efectos secundarios no deseados en nuestro organismo.

Sin embargo, hoy en día existen otras alternativas más saludables para nuestro organismo, como lo son los analgésicos naturales, de los que muchos de nosotros todavía no estamos informados de forma adecuada.

¿Llegado este punto, es necesario que nos preguntemos qué son los analgésicos naturales?

Ingredientes naturales muy sabios para nuestro organismo

Existen muchos tipos diferentes de analgésicos naturales que puedes usar a la hora de calmar tus dolores de cabeza, musculares, de las articulaciones, etc.
Cada uno de estos ingredientes tiene sus características específicas, a la vez que sus ventajas.

Cerezas

Una fruta tan exquisita como las cerezas también tiene una gran acción analgésica para ayudar a tratar diferentes dolencias.

De hecho, se puede decir que las cerezas son la alternativa natural para sustituir a la aspirina.

Las cerezas contienen antocianinas, unos pigmentos vegetales de color rojo oscuro, morado o azulado.
Estos pigmentos son favorables para nuestro organismo ya que contienen poderosos antioxidantes a la vez que ofrecen efectos calmantes y antiinflamatorios.

Ajo

El ajo es uno de los antibióticos naturales más poderosos. Pero además tiene una gran acción analgésica a la hora de disminuir las dolencias.
Se dice que el poder antiinflamatorio del ajo puede ayudar a bajar el dolor producido por la artritis y por las muelas.

Asimismo, el ajo podría ayudar a apaciguar los dolores de migraña, de cabeza, las neuralgias y la sinusitis y colabora en el buen funcionamiento del sistema cardiocirculatorio.

La responsable de estos beneficios es la alicina, que neutraliza el dolor.

Pimientos rojos

Los pimientos rojos tienen una cantidad significativa de un compuesto llamado capsaicina, que es el responsable de darle un efecto analgésico al organismo.
Por esta razón, el pimiento rojo se usa frecuentemente para disminuir los dolores provocados por la artritis y el reuma.

David Kiefer, del Centro de Salud Integrativa de la Universidad de Arizona, dice que el pimiento rojo disminuye la Sustancia P, responsable de transmitir el dolor de la zona afectada al sistema nervioso. Además, aclara que este proceso es muy efectivo pero que puede tardar unos días.

Lavanda

Por sus propiedades analgésicas y relajantes, la lavanda es uno de los analgésicos naturales más famosos.
A su vez tiene propiedades antiinflamatorias, por lo que se usa para calmar el dolor de cabeza y muscular crónicos.
La lavanda contiene un compuesto químico que se llama linalool y que tiene un efecto relajante en el organismo. La aplicación tópica del aceite esencial de lavanda es muy recomendable para bajar el estrés, calmar los dolores de cabeza, las contracturas musculares, el dolor menstrual y abdominal.