¿Que es el prospecto de un medicamento?
El prospecto de un medicamento es un documento informativo esencial que acompaña a los productos y medicamentos para informar al consumidor sobre su composición, modo de empleo y características. Cumplir con las normas de la EMA es obligatorio. Sin embargo, es importante no confundir el prospecto con la ficha técnica, que está dirigida a los profesionales sanitarios y proporciona información técnica para una correcta prescripción y uso del medicamento.
Tanto el prospecto como la ficha técnica de un medicamento están disponibles en línea en la página web de la AEMPS (Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios). En el futuro, se espera que los prospectos sean reemplazados por códigos digitales escaneables con dispositivos móviles, lo que será más eficiente y reducirá los contaminantes. Obtén más información sobre los prospectos de medicamentos y cómo funcionan en la página web de la AEMPS.
Partes de un prospecto
Se pueden diferenciar varias partes en el prospecto de un medicamento:
- Identificación del medicamento: nombre comercial, principio activo y excipientes. Dichos nombres suelen coincidir si se trata de un genérico o EFG (“Equivalente Farmacéutico Genérico”).
- Indicaciones: qué es y para qué sirve el fármaco. Explica para qué enfermedades o síntomas se ha aprobado el uso del medicamento como agente terapéutico. No sirve para otro tipo de dolencias o enfermedades que no queden reflejadas en la ficha técnica, salvo indicación médica.
- Contraindicaciones: aspectos que el paciente debe de conocer antes de empezar con el tratamiento. Casos en los que no debe tomarse el fármaco porque puede ser dañino para la salud del paciente.
- Advertencias y precauciones: usos especiales en los que hay que tener especial cuidado (niños, adolescentes y ancianos; embarazo, lactancia y fertilidad; interacción con otros medicamentos; alergias a los componentes del fármaco; uso de máquinas y conducción…), pudiendo disminuir la eficacia del fármaco y aumentar los efectos adversos
- Posología: dosis a administrar de los medicamentos: nos referimos tanto a la cantidad del medicamento a suministrar como al intervalo de tiempo entre las administraciones sucesivas. Esta indicación variará en función de la forma farmacéutica: si es en capsulas, en jarabe, granulado, etc. Dependiendo del medicamento también nos indica si se debe tomar o no con alimentos y bebidas. La duración del tratamiento también vendrá indicada y los posibles errores (si tomamos más dosis del que debe; si se olvidó tomar la dosis o si interrumpe el tratamiento).
Efectos adversos y conservación
- Posibles efectos adversos. Listado de posibles efectos secundarios diferenciando entre frecuentes (1 de cada 100 pacientes); raros (entre 1 y 10 pacientes de cada 10.000) y muy raros o no conocidos (<1 de cada 10.000). En el caso de experimentar cualquier otro efecto adverso diferente se facilita contacto para comunicarse con el Sistema de Farmacovigilancia de Medicamentos de Uso Humano.
- Conservación del fármaco. Indicaciones para una buena conservación del medicamento, con la finalidad de mantener su efectividad terapéutica y no nos cause ningún perjuicio. No consumir medicamentos caducados.
- Contenido del envase e información adicional. Información sobre la composición del fármaco; aspecto del producto y contenido del envase; titular de la autorización de comercialización y representante de la fabricación.
No obstante, en caso de duda siempre consultar de nuevo a su médico o farmacéutico.