Harpasul Spray es la opción más práctica de aplicar tu Harpasul Gel de siempre, estés donde estés. Su nuevo formato permite su uso de una menera rápida y limpia, sin necesidad de mancharse las manos.
El nuevo Harpasul® Spray es una forma sencilla y muy cómoda de aplicar todos los beneficios calmantes de Harpasul®. Disfruta de todas las propiedades del Harpasul® de siempre aunque en ahora en formato spray, lo que lo convierte en una solución muy fácil de aplicar y de acción inmediata. Un producto que concentra aceites esenciales naturales y extractos de plantas 100% activos.
INGREDIENTES:
Dimethyl Ether, Aqua, Turpentine, PEG-40 Hydrogenated Castor Oil, Betaine, Methyl Salicylate, Menthol, Camphor, Ethoxydiglycol, Propylene Glycol, Alcohol Denat, Glycerin, Melaleuca Alternifolia Leaf Oil, Eugenia Cariophyllus Leaf Oil, Rosmarinus Officinalis Leaf Oil, Lavandula Angustifolia Oil, Melaleuca Leucadendron Cajuputi Leaf Oil, Zingiber Officinale Root Oil, Cinnamomum Zeylanicum Leaf Oil, Eucalyptus Globulus Leaf Extract, Harpagophytum Procumbens Root Extract, Arnica Montana Flower Extract, Calendula Officinalis Flower Extract, Symphytum Officinale Leaf Extract, Mimosa Tenuiflora Bark Extract, Methylsilanol Mannuronate, Acrylates/Vinyl Isodecanoate Crosspolymer, Phenoxyethanol, Ethylhexylglycerin, Sodium Benzoate, Potassium Sorbate, Diazolidinyl Urea, Limonene, Linalool, Citral, Geraniol, Eugenol, Benzyl Benzoate, Cinnamyl Alcohol, Cinnamal.
MODO DE USO:
Mantenga el spray a unos 20 centímetros de la piel y pulse la válvula, manteniendo el envase en posición vertical durante unos segundos sobre la zona deseada. A continuación, realizar suaves masajes hasta su total absorción. Aplicar 2 o 3 veces al día. Lavar las manos después de cada aplicación.
PRECAUCIONES:
Recipiente a presión: puede reventar si se calienta. Mantener alejado del calor, de superficies calientes, de chispas, de llamas abiertas y de cualquier otra fuente de ignición. No fumar. No pulverizar sobre una llama abierta u otra fuente de ignición. No perforar ni quemar, incluso después de su uso. Proteger de la luz solar. No exponer a una temperatura superior a 50 °C. Mantener fuera del alcance de los niños.
No aplicar sobre heridas, mucosas ni piel erosionada. Evitar el contacto con los ojos.
