Las grasas trans

Las grasas trans (AGT) son las peores para la salud. Los fabricantes las hacen transformando el aceite líquido en grasa sólida, por tanto, son alimentos “procesados artificialmente” mediante la aplicación de hidrógeno a altas temperaturas con un catalizador. La hidrogenación hace que los aceites sean más estables para la industria. Entre estos podemos encontrar:

– Margarinas

– Bollerías

– Pasteles y tartas

– Churros

– Galletas

– Comida rápida

– Alimentos congelados tipo canelones

– Productos fritos o empanados

– Alimentos procesados y envasados

Se absorben y metabolizan en el organismo de forma similar a los ácidos grasos insaturados pero se diferencian de éstos en que el organismo no puede sintetizar las grasas trans, provocando un aumento del colesterol malo (LDL) y reduciendo el colesterol bueno o (HDL). Con lo cual, al consumir estos productos estaremos provocando la formación de placas de ateroma en las arterias con el consiguiente riesgo de un fallo cardiovascular y embolias de cualquier índole. Provocaremos un aumento de peso con tejido adiposo y correremos el riesgo de contraer diabetes tipo 2.

Al coger un alimento procesado se aconseja mirar el etiquetado para comprobar la cantidad de grasa trans que contiene. La FDA los considera aptos si contienen menos de 0,5 g por alimento. Si el porcentaje es mayor o si el etiquetado no indica nada, mejor dejarlo donde estaba.

Autor: L.A.E.M.