Adaptógenos, ¿qué son y para qué sirven?

Los adaptógenos son plantas, bayas, tubérculos, rizomas, bulbos u hongos que nos ayudan a adaptarnos al medio, a soportar episodios de estrés, y a superar ciertas dolencias y enfermedades, algunas de ellas graves. En este sentido, pues, cabe concluir que nos estamos refiriendo a una medicina tradicional y natural que ya utilizaban nuestros antepasados en diferentes zonas del planeta.
La etnobotánica es la ciencia que estudia la relación de ciertas culturas con los productos naturales que ofrece su entorno. Hoy día con los medios de difusión como internet, descubrimos nombres nuevos y nos fijamos o damos más importancia a los productos de países lejanos que a los nuestros. Pero es importante tener el abanico terapéutico de estos productos naturales lo más amplio posible. Algunos de estos elementos se han ido extinguiendo por la agricultura y la ganadería industrial, pero en la actualidad se presta gran interés por recuperarlos.

Las ventajas que poseen es que no son tóxicos, incrementan nuestra energía y nuestro sistema inmunitario, nos detoxifican, drenan nuestras impurezas y nos “ayudan” a autorregular nuestro medio interno recuperando la salud.

Algunos de ellos los podemos encontrar en cápsulas con la dosis diaria necesaria, otros frescos en el mercado.

Algunos adaptógenos:

Entre nosotros siempre hemos tenido unos adaptógenos de gran valor como el ajo, la cebolla, la ortiga, el escaramujo, la manzanilla, el espino blanco, el diente de león, el cardo mariano, etc…

Otros que vamos conociendo son:

– Ashwagandha
– Bacopa
– Ginseng
– Moringa
– Cordyceps
– Tribulus terrestris
– Cúrcuma
– Maca andina, etc…

De ellos hablaremos en próximos artículos, lo interesante es saber que los tenemos entre nosotros y que nos pueden ayudar bastante, si necesitamos información podemos acudir a nuestro farmacéutico.

Autor: L.A.E.M.